Así están las cosas, de momento, con respecto a lo laboral, pero también a los planes para el futuro cercano y lejano.
Al menos, eso hemos podido concluir durante el café y el té verde que hemos tomado esta tarde en la bonita cafetería "El aire" de nuestra ciudad (mientras el dueño no paraba de atudirnos con el jazz a todo volumen).
Lo que si vamos viendo claro es que el tiempo solo tiene la importancia que uno le quiera dar y que, de nuevo, la filosofía de que "solo pensando a lo grande se consiguen cosas grandes" sigue estando plenamente vigente.
De momento, seguimos apostando por el carpe diem y por ir "a por todas".
Ha sido un inolvidable café hablando de nuestro pasado viajero.
El "Doctorado" se ha quedado con las ganas de que tomáramos allí el café. ¡ Vaya pachorra !
Seguiremos informando…