Ayer por la noche, y por enésima vez, estuvimos viendo la película «The Doors«, dirigida por Oliver Stone y estrenada en 1991.
Un film polémico

Casi 20 años planeando el rodaje
El guión está basado en el libro «Riders On The Storm» escrito por el mismísimo John Densmore, batería del grupo que, por cierto, aparece en la película interpretando el papel del ingeniero de sonido Bruce Botnick.
Oliver Stone consumó con esta película su largamente acariciado sueño de poner imágenes a la trayectoria vital de Morrison.
Casi 20 años antes del estreno de la película, el director ya tenía listo un guión sobre el cantante y poeta, que llegó a remitirle al propio Jim Morrison y que éste leyó poco antes de morir. En 20 años, fueron muchos los actores que estuvieron a punto de hacerse con el papel protagonista, entre ellos, y aunque parezca increíble, John Travolta. Menos mal que Kilmer se cruzó en el camino de Stone.
Oliver Stone, retratista de la década de los ’60 en Estados Unidos

Una época convulsa
En el caso de la película que nos ocupa, nos encontramos con una sociedad americana sumida en plena guerra fría. Kennedy ha sido asesinado y la presidencia la ocupa Nixon, mientras la juventud está muy pendiente del conflicto de Vietnam, una juventud desorientada, sin valores y con la mente fácilmente moldeable que se convertía en un caldo de cultivo excepcional para que estos mitos proliferaran.
Jim Morrison sumido en los excesos
La cinta se centra principalmente en la figura de Jim Morrison, cantante y cabeza visible de la banda.
Su atractivo físico, su actitud inconformista y combativa, sus peculiares y provocadoras actuaciones y, sobre todo, sus letras llenas de poesía psicotrópica, son el gancho de la película, si bien, como han advertido algunos críticos, es cierto que se nos muestra un Jim Morrison excesivo, lleno de adicciones y arranques de furia, una imagen, desde luego, muy alejada en algunos momentos de lo que el artista fue en realidad, un ávido lector de poesía europea con un coeficiente intelectual de 149.
Al menos, queda patente que Oliver Stone evita caer en moralinas a la hora de adentrarse en la tan compleja como atormentada personalidad de un músico 
Un film de estética impecable
Lo primero que destaca de esta película, además de la buena selección de temas de los DOORS que incluye como banda sonora, es la oscura y psicodélica puesta en escena.
A través del impecable tratamiento estético de las imágenes, Stone intenta transmitir la misma espiritualidad chamánica que pretendía transmitir el líder del grupo con las letras de sus canciones, incluyendo para ello imágenes de los chamanes indios en los momentos en los que alcanza el trance.
En este arriesgado proyecto resalta un preciso trabajo de ambientación, decorados y vestuario, que en el caso de Val Kilmer era precisamente la ropa original de Morrison sacada expresamente de un museo para el rodaje.
No cabe duda de que la película es un buen repaso a la legendaria trinidad de la rebeldía de las décadas de los ’60 y los ’70: sexo, drogas y rock and roll.
Momentos históricos de la banda

Reparto: el impresionante trabajo de Val Kilmer

Hay quien incluso afirma que tras el rodaje, el actor permaneció muchos meses atrapado por el personaje adoptando actitudes y comportamientos similares en su vida diaria. Incluso Val Kilmer canta algunos temas en algunas escenas de la película.

El personaje de Pam Courson (Meg Ryan) se nos antoja un tanto artificial en la ingenuidad que muestra durante toda la película, así como la relación que entabla con Jim, que parece surdir de la nada, y en la admiración un tanto enfermiza por lo que Morrison escribe.
Un exhaustivo trabajo de documentación

En algunos momentos del rodaje, los supervivientes de THE DOORS no pudieron distinguir entre la voz de Kilmer y la de Morrison en algunos pasajes. Los espectadores, tampoco…















Y es absurdo pensar que Morrison leyó el guión de la película, ¿de dónde sacaste ese dato? Jim murió en 1971 y O. Stone era un soldadito recién llegado de Vietnam. Es una bella obra de arte, sin dudas, pero la peor biografía de Morrison que se haya realizado. Casi que no pegan un dato. Es como poner hechos, personajes y fechas en una licuadora y que salga ese pastiche. Morrison era, ante todo, un poeta, con una visión que después de 50 años tiene más sentido y valor. Saludos, y al que juzgue a Jimbo…que lea, escuche y vea su obra.
El guión es malísimo porque está basado en el libro de Densmore, y Densmore odiaba a Morrison.
una super pelicula pero no la e podido encontrar
Hola Paulina
Es muy fácil de encontrar en tiendas.
Por internet también es sencillo.
Y si usas redes P2P, es más sencillo aún.
Un saludo y gracias por visitarnos