Por alguna razón, los días grises siempre me han parecido mucho más interesantes que los días soleados.
Ayer por la noche, tras escuchar el sonido de la lluvia entrando por la ventana abierta de la galería interior de casa, Pilar me confesó que ha aprendido a amar los días grises y la niebla gracias a mí.
Hace un rato, al salir de la cafetería, seguía lloviendo y, la mezcla del clima con una conversación sobre la gente que, por roñosa, nunca disfrutará la gran vida, me ha traído a la mente un tema de una de mis bandas favoritas: SUEDE.
La letra no tiene mucho que ver, pero es preciosa de todos modos:
I watch the slow hand
Kill the day,
I see my starring mode take away,
I watch the skyline,for him to come
And when he comes alone,we'll be gone.
And we'll go into the city,into the light
We'll be there in the headlines,
in care of the night
Cause this is the big time
this is the way
Now he's in the big time
he'll show you the way
This is the big time
This is the way
Now he's in the big time
And your in the way…
Si el clima sigue así, otro día escribiré más sobre la lluvia y la niebla…