Ayer por la noche estuvimos viendo una película muy interesante.
Se trata de «12:01 Testigo del Tiempo» («12:01» Jack Sholder, 1993), una película realmente intrigante, sobre la tecnología de los viajes en el tiempo.
Sinopsis
Barry Thomas (Jonathan Silverman) es el típico empleado de oficina. Trabaja en el departamento de personal de una gran empresa dedicada a la fabricación de productos de alta tecnología y de investigación en física cuántica.
Se encuentra al borde del despido por su ineptitud, mientras un insoportable compañero suyo, no para de gastarle bromas de mal gusto.
Se siente atraído por Lisa Fredericks, una atractiva científica que trabaja en el departamento de investigación y desarrollo de su misma empresa.
Después de una jornada de trabajo, Barry es testigo del asesinato de Lisa, acribillada a balazos por un par de siniestras personas desde un coche que irrumpe a la salida del edificio de oficinas.
El shock que le provoca a Barry ser testigo de esta escena le lleva a ir a un bar a emborrachase, llegando en estado ebrio a su casa a dormir.
En el momento en que Barry se tumba en la cama y acerca su mano a la defectuosa lámpara de su dormitorio, recibe una descarga eléctrica exactamente a 12:01 AM.
A la mañana siguiente, se da cuenta de que todo está ocurriendo exactamente como lo hizo el día anterior. No solo eso. Lisa sigue viva y en su puesto de trabajo. Al final de la jornada, a pesar de los consejos de Barry, Lisa vuelve a morir acribillada a balazos.
A la siguiente mañana, entiende que se encuentra en una especie de bucle temporal, y decide encontrar una solución, así como conseguir salvar la vida de la guapa compañera de trabajo. Al fin y al cabo, Barry es la única persona que parece ser consciente de este bucle temporal, y pretende aprovechar su circunstancia.
Película imposible de encontrar
«12:01 Testigo del Tiempo» es quizás la película que más años me ha llevado conseguir.
Tan solo pude verla una vez en La2 de TVE hace más de una década y desde entonces he estado obsesionado por saber cómo se titulaba y por encontrarla.
La dificultad para hacerme con ella proviene, tal vez, del hecho de que no se trata de una producción para la gran pantalla, sino para televisión, lo que, sin embargo, no resta calidad al film. Incluso parece estar basada en una novela, a juzgar por lo bien desarrollada que está la trama.
Una atmósfera inquietante
La atmósfera que envuelve a esta película es realmente intrigante.
No sé si se deberá al tipo de cámaras utilizadas, a las localizaciones, o a la mediocre calidad del sonido de doblaje, pero todo resulta como un sueño.
Cine sobre viajes en el tiempo
A estas alturas no voy a ocultar mi fascinación (¿debería decir «obsesión»?) por las películas sobre viajes en el tiempo.
Son muchas las películas que, con ese argumento, ya hemos visto, como «Primer«, «Timecop«, «Atrapado en el Tiempo«, «Frequency«, «El Efecto Mariposa«, «El Experimento Filadelfia«, «Biggles«, «El Sonido del Trueno«, e incluso «Donnie Darko«, pero quizás «12:01» y «Regreso al Futuro» sean las que más nos han marcado.
Curiosamente, pueden observarse muchas similitudes entre esta película y «Atrapado en el Tiempo» que gustosamente comentaremos si queréis.
El reparto
En cuanto al reparto, podemos ver a una de las caras más conocidas del cine de los ’80, Helen Slater, dando vida a una trabajadora empleada de gran formación universitaria, papel que ya representara en «El Secreto de Mi Éxito«, hasta el punto de que ¡¡algunas escenas parecen una copia exacta de la película que compartió con Michael J. Fox!!
También podemos ver a un irritante compañero de trabajo encarnado por Jeremy Piven, al que recordamos de películas como «Serendipity» o «Family Man«, otra película relacionada con la distorsión espaciotemporal.
Incluso, durante algunos segundos aparece Danny Trejo, como siempre, en el papel de delincuente.
Actualización del 20 de abril de 2015:
Ayer por la noche volvimos a ver esta divertida película y nos dimos cuenta de los numerosos parecidos que presenta con «Atrapado en el Tiempo«.
Por cierto, acabamos de saber que tanto «12:01 Testigo del Tiempo«, como «Atrapado en el Tiempo«, podrían estar basadas (aunque no lo reconozcan), en la historia corta titulada «12:01 PM», escrita por Richard A. Lupoff en 1973, según se afirma en la Enciclopedia Greenwood de Ciencia Ficción y Fantasía.