Llegamos a la ciudad más emblemática del Japón tradicional.
Empezamos por la fortaleza samurai que tenemos al lado del hotel.
Después, visitamos un paraje extraño y ligeramente macabro lleno de pasadizos de torii, tumbas e imágenes de la diosa Kannon.
Cenamos en un precioso pueblecito cercano. En él, la época Tokugawa parecía seguir presente.