Ayer por la noche vimos una película muy interesante.
Se trata de «American Playboy» («Spread«, 2009), una película que, aunque conseguimos hace muchos meses, habíamos pospuesto ver hasta ahora pensando que su argumento iba por derroteros más frívolos y de comedia.
Sinopsis
Nikki (Ashton Kutcher) es un actractivo joven que aprovecha sus encantos para seducir a mujeres y vivir de ellas.
Sin duda, domina perfectamente todas las artes amatorias y de seducción. Es un playboy muy profesional.
Acaba de llegar a Los Angeles y, sin lugar donde hospedarse, ni coche, ni apenas dinero, decide enrollarse con Samantha (Anne Heche), una abogada de mediana edad en una fiesta veraniega llena de gente guapa y con dinero.
Samantha le proporciona, además de mucha actividad sexual, una imponente casa en Hollywood Hills, una vida de alto nivel, y muy pocas preguntas sobre su pasado o su vida actual, puesto que ella asume el tipo de persona con quien se está enrollando, pero necesita vivir con alguien que le espere al regresar a casa.
Todo es perfecto en la vida de Nikki, hasta que conoce a una guapa camarera llamada Heather (Margarita Levieva) que, según parece, es inmune a sus encantos…
Un drama nada frívolo
Aunque sé que decir que es una película mejor de lo que cabe esperar es desvelar parte de su encanto, no puedo dejar de decirlo.
No es una película frívola, ni una comedia adolescente. Es un film que está a la altura de las buenas películas que ha protagonizado este joven actor.
Es una película un tanto dura y real sobre la vida de los playboys y vividores de los ambientes glamurosos de las grandes ciudades.
Un proyecto personal de Ashton Kutcher
Kutcher es el autor de esta historia que, tal vez, tiene tintes autobiográficos.
Se trata de un proyecto personal del actor de Iowa que quiere huir de los papeles frívolos y de comedia, demostrando que puede ser un buen actor. Nosotros somos de la opinión de que este chico vale mucho.
Críticas muy destructivas
Sin embargo, las críticas sobre esta película fueron demoledoras. Se dijo que esta película era un juego efectista que solo mostraba la vacuidad de la via de Los Angeles. Pues eso.
Nos da igual lo que se diga de este film. Nosotros lo recomendamos enérgicamente. Es una buena película. No hay duda.