Lo de seguir la cotización del yen frente al euro es una costumbre que, desde finales de diciembre, se ha arraigado en mí y en todas las personas con las que me relaciono en twitter.
Tras registrar el yen una fuerte apreciación a lo largo del último trimestre del año pasado, el euro ha ido recuperando lo perdido, de manera lenta y progresiva, desde mediados de enero.
Y cada uno tiene sus expectativas, como siempre.
De momento, parece haber una resistencia en aproximadamente 110 yenes por euro.
Calculo que, si nada raro se interpone, el euro alcance los 112 o 113 yenes a finales de marzo.
Ahora queda ya muy poco para coger el avión. Y claro, ahora nos interesa que la resistencia se sitúe lo más arriba posible.