Precisamente ayer se cumplía un año de nuestra visita a Philadelphia y, casualmente, hemos decidido volver a ver la película «La Búsqueda» («National Treasure«, 2004).
Sinopsis
El protagonista de la película es Benjamin Franklin Gates (Nicolas Cage), un historiador aficionado a la criptología graduado en historia por la Universidad de Georgetown que desciende de una familia de buscadores de tesoros que cree en la leyenda de uno escondido por los Padres Fundadores de los Estados Unidos, olvidado al cabo de los años.
Según el argumento de la película, la primera pista para encontrar ese tesoro se la entregó Charles Carroll, el último firmante vivo de la Declaración de Independencia de los Estados Unidos, al tatarabuelo del abuelo de Ben, Thomas Gates (Jason Earles) en 1832.
Por ello, el protagonista ha dedicado su vida a buscar el legendario tesoro de Los Caballeros Templarios, del que se decía que era el botín más increíble de todos los tiempos y que estaba escondido en algún lugar de América.
El arqueólogo Ben Franklin Gates es el octavo hijo de una familia en la que todos sus miembros persiguen lo mismo: encontrar un tesoro escondido en un enorme arcón militar, un fabuloso tesoro ligado a un grupo de masones. Se supone que George Washington, Thomas Jefferson y Benjamin Franklin lo escondieron para financiar la Guerra de la Independencia.
Durante siete generaciones, los miembros de la familia Gates buscaron las pistas que los Padres Fundadores de América dejaron, y recorrieron cada rincón del país en busca del tesoro. Ahora, el inconformista Ben al fin ha conseguido descubrir la pista definitiva que le llevará hasta el tesoro: un mapa oculto en el reverso de la Declaración de Independencia.
Dado que Benjamin es traicionado por un antiguo ayudante suyo, Ian Howe (Sean Bean), el protagonista se enfrenta a un difícil dilema: o es el primero en robar la Declaración de Independencia de los Estados Unidos, que se encuentra en la Sala de Exposiciones del Archivo Nacional de Washington, sellado en una urna de cristal y bronce para su protección, protegido por el sistema de seguridad más sofisticado del mundo, o dejará que caiga en manos extremadamente peligrosas.
A partir de ahí, comienza una carrera por enconrar las diferentes pruebas diseminadas por varios lugares de la costa Este de Estados Unidos, por convencer a una incrédula y atractiva, aunque algo ñoña, conservadora de los Archivos Nacionales, Abigail Chase (Diane Kruger), y por evitar que el tesoro sea encontrado por su ex ayudante, mientras esquiva la persecución de la policía, comandada por Harvey Keitel.
Entretenida cinta llena de momentos interesantes que, de algún modo, recuerdan las sensaciones que pudimos experimentar la primera vez que vimos las películas de Indiana Jones aunque, lógicamente, a años luz de distancia de una de las obras maestras de Spielberg.
Para encontrarlo, hay que descubrir un código secreto que está en la Constitución (y un mapa que podría estar dibujado en el anverso de la Declaración de Independencia).
Entretenida, que no es poco
Como película de aventuras consigue entretener y mantener la atención durante las dos horas de metraje que, en los tiempos que corren, se puede decir que es suficiente.
Intriga y acción
Se puede dividir en dos partes. La primera parte está más enfocada al misterio, poniendo en situación al espectador sobre el pasado de esa gran nación como es Estados Unidos.
La segunda parte se convierte en una gran gymkana por EE.UU. con claves y jeroglíficos que resolver en cada punto. Es dinámica y, aunque dura dos horas, prácticamente no hay momentos aburridos.
Duras críticas
Entre las críticas que le han llovido a esta película se encuentran aquellas que creen inverosímil que el protagonista pueda encontrar pistas y mensajes ocultos en edificios y objetos que desde hace tantos años se veneran públicamente. En realidad, todos aquellos que critican ese aspecto desconocen que, a veces, siguen apareciendo mensajes ocultos en objetos históricos.
¿Incitación a poner de moda la historia?
Parece otra de esas películas fuertemente subvencionadas para poner de moda algo (en su día Top Gun consiguió que cientos de jóvenes se alistaran en el ejército del aire y con ésta película tal vez consigan que miles de estudiantes se interesen por la historia de Estados Unidos y su Declaración de Independencia).
El sueño de una historia más interesante
En resumen, se trata de una película con la que Joh Turteltaub, de la mano de Disney, pretende que pasemos un rato entretenido mientras nos cuenta una historia increíble sobre el pasado de los padres de la patria estadounidense y los masones.
Precisamente hace unos días se inauguraba en Madrid otro obelisco masón…
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😉
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