Ayer por la noche, nos decantamos por ver otra road movie.
Pilar eligió ver «Jugando a Tope» («Play it to the Bone«, 1999) tras ver unas pocas imágenes de la película en que se veía un viejo coche americano por carreteras desérticas.
Sinopsis
La película nos cuenta el viaje que realizan dos amigos, César (Antonio Banderas) y Vince (Woody Harrelson), boxeadores en decadencia que tienen que trasladarse hasta Las Vegas para pelear el uno contra el otro por una importante suma de dinero que les ha ofrecido un promotor de espectáculos de la ciudad del pecado.
Se supone que pelearán antes del gran combate de Mike Tyson, combate que se celebrará en tan solo 24 horas.
César decide convencer a su novia Grace (Lolita Davidovich) para que les lleve en coche hasta Las Vegas, la misma chica que fue novia de Vince.
Numerosas millas a través del desierto darán mucho juego…
Una road movie acalorada
El director, Ron Shelton, convierte la película en una road movie en la que se suceden las conversaciones más alocadas, las discusiones más acaloradas, y hasta una tórrida, aunque cutre, escena de sexo.
Estamos ante la clásica película de perdedores ante una última oportunidad. Shelton no escatima convencionalismos a la hora de retratar a los tres, aunque las convincentes interpretaciones del trío hacen que sea inevitable que acabemos sintiendo simpatía por ellos.
Ritmo lento
La película se divide en dos parte muy diferenciadas: el viaje y la pelea. Un esquema extraño que provoca que el ritmo de la película sea lento y muy poco entretenido.
Las escenas del viaje se hacen pesadas y algo planas, al menos hasta que aparece la maravillos Lucy Liu, de la que me confieso perdidamente enamorado.
En cuanto a la segunda parte, estamos ante un intento de Rocky que se queda en eso, un intento.
Una parte que se hace tremendamente larga y aburrida para acabar en lo que es obvio que iba a acabar.
Uno de los peores papeles de Antonio Banderas
Una película en la que a Banderas le encargan uno de los peores papeles de su carrera que, además, tampoco se esfuerza en mejorar.
Woody Harrelson hace un mejor papel, el de un perdedor obsesionado con Jesucristo.
Aunque la película es muy floja, al menos, el combate está trufado de numerosos cameos que no desvelaremos, pero que resultan muy curiosos.
Enfrentamiento real
Según parece, en el rodaje de este film se produjo un sonado enfrentamiento real entre los protagonistas. Parece ser que Harrelson se metió tanto en el papel que llegó a lesionar a Banderas durante una de las secuencias.
Por el motivo que sea, el caso es que Antonio criticó duramente a su compañero durante toda la promoción y, a día de hoy, es mejor no recordarle su nombre.
Lenta, larga y poco entretenida
En definitiva, una road movie que se hace tremendamente larga y con dos partes bien diferenciadas donde ni las escenas de boxeo ni el humor acaban de funcionar.
Lo mejor: Lucy Liu (y tal vez Woody Harrelson, al que los papeles de perdedor le van como un guante)
Lo peor: el exceso metraje de una historia con vocación de cortometraje.
Actualización del 30 de mayo de 2012
Añadimos unas cuantas fotos del precioso descapotable utilizado en el rodaje, un Oldsmobile Cutlass 442 de 1972.