Esta tarde hemos estado encerrados viendo la película más apropiada para estas fechas.
En una tarde fría, húmeda y sombría en un pequeño pueblo de Zamora en el que reside la familia de Pilar, hemos pasado la tarde viendo la que posiblemente es la historia más típicamente representada en la víspera del día de todos los santos: «Sleepy Hollow» (1999).
Sinopsis
La historia tiene lugar en un asentamiento holandés del Estado de Nueva York llamado Sleepy Hollow (el Valle Dormido), lugar de numerosas leyendas sobre fantasmas.
Allí es enviado Ichabod Crane, un agente de la policía científica, a investigar los crímenes de un asesino en serie que decapita a sus víctimas.
Se trata de la historia de miedo con la que más disfrutaba cuando era pequeño.
Aún más gótica que la historia original
Tim Burton, en su particular cruzada por mostrar la imagen más gótica de este mundo, da una vuelta de tuerca a la novela más famosa de Washington Irving, sumiendo toda la historia en un ambiente aún más tétrico que en versiones anteriores, aunque con algunos toques de humor absurdo e histriónico que tan bien le quedan a Johnny Depp.
Por encima de una historia conocida y que nunca dejará de impresionarnos, el film destaca por su ambiente único y por unos personajes muy bien desarrollados.
¿Te gustaría conocer la ciudad de Seattle con la compañía de un local?
Costaba creer que el director, atrapado en su propio mundo gótico, tardara tanto en rodar este film, la quintaesencia de la pagana festividad de Halloween.
No es solo una película; es una sucesión de preciosos cuadros costumbristas de una Nueva Inglaterra otoñal y tenebrosa.
Si te gustan las historias de brujas y fantasmas, y si disfrutas con los ambientes oscuros y fantasmagóricamente góticos, ésta es tu película.
Actualización del 28 de octubre de 2012:
Mientras volvemos a ver esta magnífica película, aprovecho a dejar aquí un enlace a un blog en el que se analizan las diferencias entre esta película y la magnífica novela de Washinton Irving. Advertimos que incluye spoliers.