Ayer por la noche tocaba revisión de otro clásico de los ’80.
Hace 30 años se estrenó en Estados Unidos (en España se estrenó un año más tarde) una de las películas más recordadas de la década de los ’80.
Nos referimos a «De Pelo En Pecho» («Teen Wolf«, 1985), dirigida por Rod Daniel. Una sencilla comedia que convierte una novela de terro gótico en una anécdota adolescente. Todo un acierto.
Sinopsis
Scott Howard, un estudiante de instituto que no destaca en nada nota que está sufriendo profundos cambios en su cuerpo hasta que acaba descubriendo que es un hombre-lobo.
Aunque este hecho le provoca preocupación y rechazo, gracias al consejo de su padre comienza a descubrir que tiene muchas ventajas.
Otro éxito de taquilla para Michael J. Fox
Tras su gran éxito protagonizando «Regreso Al Futuro« en el papel de Marty McFly, Michael J. Fox volvió apenas unos meses después a las carteleras con este film que se convirtió en todo un éxito de taquilla y que provocó una segunda parte (aunque ya no estuvo protagonizada por el actor canadiense).
Este éxito le sirvió para mantenerse como un actor deseable en Hollywood y, sobre todo, para evitar que se encasillara demasiado (aunque desde luego, de lo que no se libró fue de encasillarse como eterno adolescente de instituto).
No obstante, en Italia prefirieron mantener el tirón de Marty McFly, así que el nombre de Scott se cambió en este film por el de Marty, sin ningún pudor.
A pesar de tratarse de un film sencillo, está muy bien dirigido, y mantiene en todo momento un ritmo alegre y divertido.
¿Metáfora de la adolescencia y los cambios hormonales?
Desde la primera vez que la vi, creí entender que detrás del guión se esconde una metáfora de la adolescencia desde su lado más cruel: el lado hormonal.
El film parece enviar un mensaje a todos los adolescentes que ven cómo sufren cambios físicos en esa época de su vida: no tiene por qué ser malo, e incluso puede ser muy bueno, pero no te excedas en sacarle provecho.
Por lo demás, un film divertido, de esos en los que los estudiantes sueñan con ganar popularidad, con grandes juergas nocturnas y hasta con escenas deportivas épicas. Y, por supuesto, no podía faltar el amigote del protagonista, capaz de darle un giro divertido a cada acontecimiento.
Todo un compendio de estereotipos que tanto gustaba en aquella época.
Además, el film consiguió revitalizar la canción «Surfin’ USA» de los BEACH BOYS.
Por cierto, en la escena final, puede verse, al fondo, en las gradas, un hombre con la bragueta abierta, algo que parece ser que se ha comentado muchísimo a lo largo de los años.
Localizaciones de rodaje que nos son familiares
La mayor parte del film está rodado en Pasadena.
Curiosamente, algunas de las localizaciones se utilizaron en otros films.
Así, la casa de Scott Howard se encuentra en el 1727 de Bushnell Avenue (off West Huntington Drive, South Pasadena), la misma casa de Marty McFly en «Regreso Al Futuro» y en la misma manzana que la casa de Lorrain Baines en el año 1955 en la misma película.
La escuela es la misma que aparece en «La Chica de Rosa«, y la licorería está muy cerca de algunas localizaciones utilizadas por Christopher Nolan en «Memento» y «Terminator III«.